En este apartado vamos a hablar sobre como cambiar la cinta de las persianas. En otro apartado ya hablamos sobre los tipos de cintas para persianas que hay y que cada persiana necesita la suya, no sirve cualquiera. Como dijimos, hay cintas de persiana de 14, 16, 18, 20 y 22 mm. Basta con medir el ancho de la que queremos cambiar o llevarnos una muestra si ya está rota. Hoy en día podemos encontrar estas cintas en cualquier ferretería o en grandes almacenes. Si es cierto que hay ciertos colores (negro, rojo, azul, verde,…) que sólo podremos encontrar en comercios especializados, estos suelen tener tienda online. No es necesario tener una amplia gama de herramientas para cambiar la cinta o el cordón de una persiana, pero serán imprescindibles las siguientes: una escalera de mano, un destornillador plano, un destornillador de estrella y uns tijeras. Con esto es más que suficiente y en casi todos los hogares disponemos de estos utensilios.
Abrir el cajón o capialzado. Una vez que tenemos la cinta, necesitaremos una escalera para acceder al cajón o capialzado. Si es un compacto, la tapa será de pvc y suelen ir embutidas a presión, con tirar de la pestaña inferior que hay en la tapa bastaría, es recomendable empezar por un lateral y no por el centro. Si no tiene pestaña necesitaremos un destornillador plano para hacer palanca y poder quitar la tapa poco a poco, en estos casos se suele marcar la tapa y el cajón de pvc, por el destornillador que es metálico. Podemos buscar algo que no lo marque o hacerlo con sumo cuidado. Si es una persiana con cajón de obra, la tapa será de madera y tendremos que quitar todos los tornillos, empezar por los laterales y dejar los del medio para el final, si las tapas son grandes necesitarán la ayuda de otra persona para manejarla con seguridad.
Quitar la cinta vieja. Una vez quitada la tapa tendremos acceso al eje y a la polea de la persiana. Lo siguiente es soltar la persiana del eje, pero antes hay que quitar la tensión a la cinta de la persiana, para esto la soltaremos del recogedor que estará embutido en la pared o será exterior abatible, si se trata de una mini, los recogedores de persiana pueden ser de pvc o metálicos, en cualquiera de estos casos hay que acceder al tambor metálico del recogedor para soltar la cinta, suele estar unida con un tornillo muy pequeño, con una tuerca muy pequeña (cuidado no lo perdáis) o con un fleje metálico que sale del tambor del recogedor. Mucho cuidado al hacer esta operación, ya que el tambor estará cargado y al soltar la cinta girará a toda velocidad, pudiendo causarnos heridas en los dedos o en la mano, para ello sujetar con firmeza el tambor del recogedor antes de soltar la cinta y después ir aflojando poco a poco hasta que veamos que ya no tiene fuerza. Esto último si la cinta no está rota, si es así veremos que no hay tensión en el tambor del recogedor.
Una vez que no hay tensión, ya podemos soltar la persiana del eje, para esto hay que soltar los tirantes de la persiana, sobre los cuales también hemos hablado en otra sección, fijarse bien o hacer una foto para ponerlos luego igual. Los tirantes pueden ser de cinta, con lo cual sólo hay que desatornillarlos del eje, suelen ir con un clavo-tornillo (tornillo con punta de clavo) o con un tornillo normal y corriente. Tendremos que comprobar que estos tirantes están en condiciones y valorar si hace falta cambiarlos también. Los tirantes también pueden ser metálicos, que pueden ir atornillados o unidos con la punta de flecha característica de estos. Si es punta de flecha veremos que el tirante entra en una de las ranuras del eje, con cerrar un poco la punta de flecha con los dedos bastaría para sacarla, cuidado que nos podemos cortar. Una vez separado el eje de la persiana hay que retirar la cinta deteriorada. para ello tiramos de la cinta viendo que el eje gira y la cinta se va desenrollando de la polea, la cinta puede ir unida a la polea de la persiana con un tornillo o con un nudo, pasando por una de las aberturas de la polea. Si es un compacto, es posible que lleve chapas de contención laterales metálicas, hay que soltar la que impide el acceso a la polea, van atornilladas y no siempre es fácil quitarlas, mucho cuidado al hacer esto pues pueden doblarse fácilmente y luego pueden dar problemas.
Normalmente para sacar la cinta usada hay que retirar un poco el eje, en las persianas con cajón de obra es sencillo, pero en los compactos hay que ver si la contera, al otro extremo del eje, es telescópica y va atornillada o no al eje, si es así retiramos ese tornillo y empujamos el eje hacia el lado de la contera, veremos que la polea empieza a dejar un espacio para poder acceder al lateral, quitamos o cortamos el nudo. Pasamos la cinta nueva por el pasacintas, que es la pieza que permite que la cinta acceda al cajón, puede ser una simple abertura en la parte inferior o en la tapa, si está en la tapa lo dejaremos para luego, en las persianas con cajón de obra puede estar en la misma pared. Ahora toca pasar la cinta por la ranura de la polea y hacer un nudo o atornillarla si estaba antes así. Este nudo tiene que quedar bien escondido en los huecos que lleva la polea, para que a la hora de girar no roce con el soporte, este puede ser en forma de U o puede ser un rodamiento. Una vez que tenemos la cinta unida a la polea empezaremos a girar el eje en el sentido de la caída de la persiana, esto puede ser hacia el interior o hacia el exterior, si lo hacemos mal veremos que la persiana no se enrolla en el eje como debería y tendremos que cambiar el sentido de enrollamiento de la cinta.
Enrollaremos la cinta hasta que esta quede un palmo por debajo del recogedor. Volvemos a unir la persiana al eje por medio de los tirantes. Ahora podemos probar para ver si lo hemos hecho bien, tiramos de la cinta y la persiana tiene que subir enrollándose en el eje suavemente. Sin soltar de golpe la cinta, bajamos la persiana. Si el pasacintas estaba en la tapa es hora de pasar la cinta en sentido inverso, de dentro hacia afuera, ponemos la tapa tirando un poco y suavemente de la cinta para que quede toda en el exterior. Si el pasacintas estaba en la pared o en la parte inferior del cajón, podemos unir la cinta al recogedor antes de poner la tapa. Para unir la cinta al recogedor, lo primero es hacer un pequeño corte en el centro de la cinta en sentido longitudinal a unos dos o tres dedos del extremo de la cinta, fijaros en la que habéis quitado, ahora hay que pasar la cinta por la pestaña que hace de freno en el recogedor, la introducimos y comprobamos que frena, si no es así la estaremos metiendo mal.
Cargamos el tambor del recogedor, girando en el sentido que notemos que empieza a tener tensión, mucho cuidado al hacer esto ya que si se nos escapa nos puede causar daños como antes al soltar la cinta, una vez cargado unimos la cinta igual que estaba al principio, con el tornillo, la tuerca o el fleje. Soltamos despacio el tambor que teníamos bien agarrado y vemos que tira de la cinta, enrollándola en el tambor del recogedor, introducimos el recogedor en la pared asegurándonos que la cinta no está retorcida por encima del recogedor y atornillamos este a la pared, si es recogedor exterior abatible, no hace falta soltarlo de la pared y le ponemos la tapa que lo cierra. Si no habíamos puesto ya la tapa del cajón es momento de hacerlo, puede que nos cueste un poco, pero con paciencia y ayuda de otra persona lo conseguiréis. Pues ya está, si hemos hecho todo correctamente, la persiana subirá y bajará suavemente. Para cambiar un cordón el sistema es exactamente el mismo. En el caso de las minis exteriores el tema cambia mucho, para esto le aconsejamos que acuda aun especialista en la materia ya que es un trabajo muy laborioso e incluso peligroso a la hora de estar trabajando en el exterior y a veces en pisos altos. Si se trata de cambiar un cable de torno lo trataremos en otro apartado. Muchas veces hemos acudido a realizar una reparación de cambio de cinta de persiana en el Norte de Madrid o en la Sierra de Madrid y nos hemos encontrado todo desmontado, reconociendo el cliente que lo había intentado por su cuenta, sin el resultado que esperaba. Para alguien acostumbrado es una operación sencilla, espero que con las explicaciones que hemos dado resuelvan el problema de cambiar las cintas de las persianas. Si no es así y tiene dudas o problemas para realizar el trabajo, en Persianas Norte Madrid, estaremos encantados de ayudarles, pueden llamarnos para pedir asistencia técnica o consultar sus dudas.